El ruido y la dificultad para cambiar a segunda podrían deberse a los cables o varillas del selector de marchas. Aunque ya cambiaste el embrague y los piñones, es posible que las guías o los bujes del sistema de selección estén desgastados o secos. Aquí algunas recomendaciones:
Lubricación del sistema de selección:
Asegúrate de que las varillas o cables del cambio estén bien lubricados. El ruido de "goma" suele indicar falta de grasa en las partes móviles.
Revisión del sincronizador de segunda:
Aunque mencionas que cambiaron los piñones, verifica si el sincronizador de la segunda marcha está en buen estado. Un sincronizador defectuoso puede generar problemas intermitentes para engranar la marcha.
Estado del soporte de la palanca:
Si el soporte o las gomas de la palanca están dañados, podrían generar ese gemido o sensación de resistencia al cambiar.
Verifica el alineado de los cables:
Un desajuste o mal alineado en los cables del cambio puede hacer que algunas marchas cuesten más de lo normal.
Te recomendaría llevarlo a un taller especializado en transmisiones para una revisión más detallada de los componentes externos del cambio, ya que parece ser un problema recurrente que no se resolvió con las reparaciones previas. ¡Suerte!
Me dedico a la venta de llantas