Hola!
Pues aprovechando que finalmente me han dejado la mañana libre y a la compra van a ir mis padres... aprovecho y os pongo las fotos y una pequeña cronica del Camino de Santiago, pequeña por decir algo jeje... porque en una semana de aventura pasan tantas cosas...
Empiezo situando la historia en el espacio y en el tiempo. Salimos de Burgos el sabado 29 de Mayo, aun no sabiamos lo que nos esperaba, habiamos leido, nos habiamos documentado, pero todo lo que oyes no tiene nada que ver a lo que luego ves en El Camino. Saliamos de Burgos con 531 Km por delante y el objetivo de completarlos en una semana. En Burgos sellamos nuestra cartilla de peregrino, que se convierte en una especie de DNI del peregrino y te da derecho a alojamiento, ademas de ser un bonito recuerdo, ya que la vas sellando por los pueblos que pasas y al final de alegria ver tantos sellos, cada uno de ellos una historia y cada uno de ellos los recordaras siempre. Mis compañeros eran mi tio Antonio y su cuñado, Goyo.
Una vez bajamos del coche montamos las bicicletas, las alforjas, fijamos los anclajes, nos pusimos el casco los guantes... me despedi de mis padres y subi a la bici, la que seria mi hogar durante los proximos 7 dias, y empezamos a dar las primeras de tantas pedaladas.
La salida en Burgos:
Yo tenia la esperanza de que los primeros dias El Camino fuera clemente con nosotros y que la llanura castellana nos favoreciera, y efectivamente la llanura es "llana" pero no "lisa" y las cuestas fueron pocas, pero el terrerno duro, los caminos de tierra con muchas piedras y grietas hacian que la conduccion fuera muy exigente, ademas las alforjas hacian la bici muy inestable y era facil volvar e imposible ponerse de pie (al menos al principio, luego nos hicimos a las alforjas y manejabamos la bici sin problemas) por lo tanto el dolor en el cuello y brazos empezaba a notarse cuando aun estabamos a 500 Km de Santiago, y para colmo el sol nos habia marcado y estabamos bastante quemados y rojos.
En la primera etapa destaco San Anton, una iglesia derruida, reconstruida en albergue y carretera, ya que la nacional para por dentro de la iglesia, sorprendente.
Yo soy el de naranja:
Tras la primera etapa llegamos a Fromista, y al llegar al albergue... no hay sitio! como un favor especial nos dejan dormir en el suelo, asi que cenamos algo (concretamente cenamos queso, lomo y tomate jeje) y a la cama, bueno, al suelo, cada uno colocado entre dos literas, con miedo de que el vecino de cama nos pisara al levantarnos y sin poder dormir gracias a los ronquidos de alguno y a las pesadillas de un peregrino frances que se puso a gritar en medio de la noche.
Pronto, muy pronto, nos levantamos e iniciamos la 2º etapa que nos llevaria a Sahagun, una etapa demoledora para los que van a pie, ya que la llanura castellana se hace mas evidente que nunca y rectas interminables de kilometros se extienden delante de ti, nosotros, ayudados de nuestras monturas, las podiamos cruzar de manera relativamente rapida, pero la peregrino a pie le debia resultar pesado ver que delante de el solo habia una recta de 10 Km
Monumento al peregrino
En Sahagun la acojida no fue mucho mejor que en Fromista en lo que a instalaciones se refiere, y aunque nos dieron cama no nos pudieron dar agua caliente por problemas de calentadores, asi que una ducha fria nos alegraria el cuerpo, y tras la ducha toco sesion de mecanica porque mi bici se habia averiado, el cambio no funcionaba y las marchas no entraban bien o escupian la cadena, lo que me provoco mas de una caida al quedarme sin "traccion" en momentos delicados.
El albergue de Sahagun impresionante, una antigua iglesia reconstruida en albergue donde pudimos gozar de algun que otro capricho visual bastante alejado del espiritu del pregrino, y es que nos encontramos con un grupo de francesas que alegraban la vista y el espiritu jaja... y claro, es de todos sabido que en El Camino no hay vestidores, y una mañana desperte entre mujeres desnudas (se estaban cambiando de ropa) asi que pense que habia muerto y habia ido al cielo, pero no, asi que como buen mortal me tuve que levantar para afrontar la 3º etapa, que nos llevaria a Leon.
Tras la alegria del despertar llego la tristeza de sentarse en el sillin, cosa que empezaba a ser dificil por el dolor que arrastraba de los dias anteriores, y para colmo, aquel dia me dio una tendinitis en las rodillas, y sin duda esto marcó para mi el resto del camino, ya que no podia ponerme de pie para pedalear, aunque tampoco podia hacerlo debido a la averia de mi bici que aun duraba y que me acompaño hasta Santiago. La tendinitis unida a las quemaduras del sol hacian el viaje muy "agradable"
El camino de nuevo era llano y sin mucha complicacion, salvo el aburrimiento de ver campo y mas campo delante de ti, y de sentir dolor en la rodilla, y pronto llegamos a Leon, la ciudad mas grande que encontrariamos en todo el camino. En Leon nos alojamos en un convento, donde fuimos bien recibidos, y tras dejar las bicis y ducharnos fuimos a comer a un restaurante andaluz regentado por un tipo apodado "El Cipote" cuya limpieza y amabilidad brillaban por su ausencia, comimos mal pero nos reimos mucho, todo hay que decirlo. El tio era bastante "grueso" y con pocos dientes la verdad, camisa grasienta y andares un poco raros.
Nuestro amigo "El Cipote" nos ofrecio ensalada de la casa, que segun decia la llevaban haciendo durante años y estaba muy buena, asi que probamos a ver, y efectivamente se llevaba haciendo durante años, pero no él, sino Bonduelle!! porque era ensaladilla de bote 100% tras el 2º plato vino lo mejor: los postres. Cuando los pedimos no nos dio a elegir, el lo hizo por nosotros y grito a la cocina ¡¡prepara unos postres!! y salio de la cocina una chica de unos 25 años, con cara de enfado, que saco 3 flanes Dhul delante de nosotros y los puso en 3 platos, ale, el postre esta servido jajaja.... tambien vivimos otras aventuras en ese bar como un corte de luz, y estando el señor Cipote sentado pidio a uno de los clientes que le diera al automatico de nuevo, porque habia saltado jaja.. increible.
Despues de comer fuimos al centro de salud donde me miraron la rodilla, que empezaba a doler bastante y me recetaron una crema, depsues visitamos Leon, una ciudad preciosa, y tras la visita compramos en el super y cenamos una ensalada "de verdad" en el albergue. Tras la cena las monjas nos ofrecieron un pequeño concierto de canto en el cual participabamos todos los peregrinos.
Parador de Leon, precioso, y puedes dormir alli por un "modico" precio:
Catedral del Leon
Ya por la mañana salimos de Leon, la salida fue desastrosa, muy mal organizada, atravesando poligonos indutriales y jugandote la vida por carreteras con mucho trafico y emprendimos camino a Rabanal del Camino, nuestro proximo destino. Se notaba que estabamos ya en Leon y el terreno empezaba a tener sus pequeños repechos y alguna que otra subida dura como la que llega hasta Astorga, por cierto, bonita ciudad.
Bajando este monte llegas a Astorga:
Foto de Astorga, mi tio y su cuñado, mis compañeros de viaje:
Algunos peregrinos peculiares jeje.. el que estaba en medio del mogollon haciendo la foto era yo:
Uno de los muchos monumentos al peregrino:
Despues de comer llegaba lo mas duro, subir medio puerto de "La Cruz de Hierro" y por fin llegamos a Rabanal del Camino, nuestro final por ese dia. En Rabanal hay dos albergues, uno esta dirigido por unos alemanes, los cuales son, ademas de bordes, maleducados y bastante imbeciles en general, nos negaron la entrada por ir en bicicleta, asi que decidimos ir al albergue del pilar, donde el trato fue totalmente diferente, y tras una acojida agradble nos dieron de cenar, cama y agua caliente, ¡¡por fin un poco de comodidad!! y alli conocimos a varios peregrinos que nos acompañarian posteriormente en bastante recorrido, un hombre de Palencia, Toni, un chico Valenciano, y una pareja de Santiago que volvian a su casa.
Despues de dormir como un señor aquella noche, llegaba lo mas duro del camino, entrabamos a los puertos, y hoy tendria el primer reto importante, aun con la rodilla mala empezamos a subir la Cruz de Hierro. Dice la leyenda y la tradicion asi lo obliga, que todo peregrino debe llevar una piedra desde su tierra y arrojarla a la cruz cuando llegue arriba del 2º puerto mas duro del camino, y asi lo hicimos nosotros. El sufrimiento de llegar no es comparable a la alegria que provoca ver auqella cruz y haber superado la primera prueba seria del camino. Despues no esperaba una bajada larga para recuperar y tras la bajada nos esperaba Ponferrada, dondde hicimos la visita de rigor, Villafranca del Bierzo, donde vimos a unos peregrinos muy peculiares, iban en camello y por fin, Vega de Valcarcel, donde hariamos noche antes de afrontar el "coco" del camino: El puerto de O´Cebreiro
La cruz de hierro con dos peregrinos con los que viajabamos a menudo, segun nos fueramos encontrando
Ponferrada
Villafranca del Bierzo y los peregrinos en camello
El albergue de Vega era muy bonito, tras un paseo por el pueblo tuvimos una cena en comun con todos los pregrinos, hablamos con alemanes, ingleses, holandeses, franceses, un riojano un poco bocazas que no paro de criticar a los que hacian el camino en bici sion saber que nosotros eramos ciclistas, decia que no representabamos el esfuerzo del camino y que para nosotros era mas facil, al otro dia cambiaron las cosas, ya os contare mas adelante. En la cena habia una pareja de unos 50 - 60 años que venian desde Holanda en bicicleta, y una chica alemana que hacia el camino para aprender español... cada peregrino una historia que mereceria ser contada por si misma.
Palloza de Vega de Valcarcel:
Tras dormir muy bien esa noche, llegaba la hora de la verdad, O´Cebreiro me esperaba. Hay dos maneras de subir, una por el camino original y otra por la carretera nacional, que es mas suave. nosotros elegimos el camino tradicional y emprendimos la marcha, 14 kilometros de subida, con rampas de hasta un 14% de inclinacion, autenticas paredes que hacian que el marcador no pasara de 3Km/h, subir era cuestion de equilibro en muchos casos, porque no podias pasar de esos 3-4 Km/h.
Al llegar a O´Cebreiro fuimos a la pequeña ermita, donde se conmemora el milagro de O´Cebreiro, dice la leyenda que un campesino de una aldea cercana subio a Cebreiro para escuchar la misa en un dia de nieve, viento y frio, al llegar a la ermita era el unico feligres y los monjes le tomaron por loco al hacer tal sacrificio para una simple misa, entoces, y como reaccion al desprecio de los monjes, el pan y el vino se conviertiron en el cuerpo y sangre de Jesus y quedaron recojidos en el caliz que se guarda alli, ese caliz le habreis visto todos en la bandera de Galicia. Al salir de la ermita nos encontramos con nuestro Riojano-bocazas, el cual habia subido por la nacional y ademas la mochila se la habian subido en coche, vaya, el que criticaba la falta de esfuerzo de los ciclistas... Y despues de Cebreiro, cuando crees que lo pero ha pasado... el Alto del Pollo!! o lo que es lo mismo, 3 Km mas de subida pasando por el monumento del peregrino.
Alto do poio:
Aqui vivmos una anecdota que os comento. Entre los bikers (ciclistas de montaña) y los ciclistas de carretera pues hay un pique sano, y subiendo el alto del pollo nos adelanto un equipo de carretera, claro, ya podran, nosotros con nuestras ruedas gordas y 14 kilos de equipaje... y uno me dijo que me podria ganar hasta caminando, y claro, a mi eso pues me enfurecio jeje, asi que saque todo mi "red nipon power" y me lance a por el en la bajada y los adelantamos, se quedaron de piedra cuando vieron que un loco con maletas se les pego al culo y trazaba las curvas como ellos, adelantandolos en algunos tramos jeje... pequeña anecdota y record de velocidad del camino ya que bajabamos a mas de 70 Km/h es algunos tramos.
Una ves superado O´Cebreiro entramos en Galicia, pasamos por Hospital de Samos donde coincidmos con un peregrino que venia desde Alemania en bici, y Sarria, mitico pueblo ya que es el minimo exigido para recibir la Compostela, y por fin Portomarin, donde se acabaron los lujos y las comodidades, ya que el albergue estaba a punto de cerrar por la inauguracion de uno nuevo al dia siguiente, y no teniamos duchas, asi que nos tuvimos que ir al polideportivo, donde nos duchamos en las duchas comunes, desde luego preferia el cuerpo de las francesas de Sahagun al de todos los peregrinos denudos que tenia a mi alrrededor, en fin... me ducho todo lo rapido que pude evitando que se me cayera el jabon, y de vuelta al albergue, al otro dia aguardaba lo peor, no por dureza, pero si por lo larga que era la etapa.
Baaaajaaaaandooooo:
Bosques gallegos:
Hospital de Samos. yo soy el de naranja a la derecha
Portomarin:
Penultimo dia, con la mente en Santiago pero las piernas en Portomarin, y la rodilla abandonada hace mucho en Leon (aun me dolia mucho) emprendimos la que seria la ultima etapa dura, ya que el dia siguiente seria "de tramite". Nada mas salir de Portomarin uno de los compañeros partio su cadena, una averia que se arregla facilmente con un tronchacadenas, pero el nuestro... se lo habiamos dejado a unos vascos en dia anterior que lo habian roto y no nos habian dicho nada, ¡vaya faena! tardamos muchisimo en arreglarlo y el tiempo corria en nuestra contra, aunque finalmente lo arreglamos. Mi bici tampoco iba nada bien, muchos kiloemtros, mucho polvo y poco aceite, pero la de nuestro compañero volvio a partir, y esta vez de forma definitiva, tuvimos que andar varios kilometros hasta llegar a un pueblo donde encontramos al mismisimo apostol Santiago convertido en ciclista italiano que nos presto su herramienta para arreglar la bici (gracias desconocido amigo, porque nos salvaste el camino).
Con todo esto, eran las 3 de la tarde y estabamos a menos de la mitad de camino, nos quedaba aun mucho por recorrer y las fuerzas escaseaban por el cansancio y el mal dia que llevabamos (yo habia tocado el suelo ya dos veces por caidas y mi rodilla me maltrataba en cada pedalada). La etapa era entre valles, por lo que ra un continuo subir y bajar, demoledor para los ciclistas, y encima eran 93Km... ¿cuanto queda?
Por fin, y cuando ya daba pedaladas por inercia y con la mente en blanco, porque no tenia ganas de pensar en nada, llegamos (tras la correspondiente subida) al Monte del Gozo, final de la etapa y casi del camino, llamado asi por la satisfaccion de ver Santiago, El Camino habia terminado, sonrisas dibujadas en nuestras caras, mil sensaciones, ademas llegamos atardeciendo y la luz hacia mas magico ese momento, aquella noche dormi en paz conmigo mismo, habia cumplido, mucha gente me decia que no podria, incluso yo mismo estuve a punto de abandonar en Leon por la rodilla, recuerdo que a eso de las 4 de la madrugada me desperte, sali del albergue y me sente en un banco en la calle a ver Santiago, una peregrina salia andando ya, a esas horas, y yo andaba, pero hacia atras, recordando lo duro que habia sido y que ya estaba casi completado.
Monte del Gozo:
Al dia siguiente, tras el desayuno bajamos a Santiago, apenas 8 kilometros de bajada, dejar las bicis en un "garaje de bicis" recojimos nuestra merecida Compostela y escuchamos la misa del peregrino, despues fuimos a la estacion donde nos esperaba una Renault Scenic que habiamos alquilado para volver. Unas horas despues estabamos en Madrid, con nuestra familia de nuevo, un poco mas delgados, un poco mas barbudos y un poco peor vestidos de como habiamos salidos, pero mucho mas alegres y mucho mas llenos por dentro, por lo que habiamos hecho, habiamos sido capaces de sobrevivir por nosotros mismos, habiamos compartido, conocido gente, lugares, costumbres. Habiamos sufrido, reido... habiamos hecho El Camino.
Santiago con un tiempo poco acojedor:
Vaya barbas q llevaba jeje... yo soy el de la izquierda
Espero que os haya gustado la cronica, enhorabuena para el que la haya leido entera, que se las merece. Tambien me gustaria añadir unas cosillas, la primera es que yo no soy creyente, hice el camino por motivos deportivos, turisticos, aventureros, bueno, asi lo empece, luego vas descubriendo la faceta espiritual del camino que te llena y te da energia, y no hablo de espiritualidad religiosa, ya que como he dicho no soy creyente, pero puede haber espiritu sin religion, alli te ecnuentras con algo que te hace sentir muy bien, hay gente que a ese "algo" lo llama Dios o alma, otros simplemente lo llamamos paz contigo mismo y con lo que te rodea, pero lo llames como lo llames, es una sensacion estupenda que todos deberiamos conocer, y que une a miles de personas.
Buen Camino!!
Victor.
PD: la distancia total fueron 531Km hecho a una media de 14,77 Km/h